NUESTROS EMPRENDEDORES:
Tras desempeñarse por una década en distintas oficinas de prestigiosos abogados, Guillermo Chahuán, Pablo Letelier y Camilo Lledó decidieron, en plena pandemia que era el momento de asociarse. “Fue una decisión en conjunto, porque nos tenemos confianza –nos conocemos desde el año 2004 pues fuimos compañeros en la Universidad de Chile–, ya habíamos trabajado juntos, y creíamos que podíamos formar un equipo afiatado y de excelencia. Uno que combinara nuestras distintas trayectorias y experiencias para ofrecer una mirada completa y personalizada a nuestros clientes con respecto de los cursos de acción disponibles en un determinado conflicto”, cuenta Guillermo Chahuán. “Somos una oficina de abogados especializada en conflictos penales, civiles y administrativos. Apostamos por ofrecer una mirada multidisciplinaria. Vemos que en la última década se han multiplicado los conflictos y contingencias que involucran, al mismo tiempo, asuntos y problemas de derecho privado, penal y regulatorio. Por eso, es usual que un conflicto corporativo entre socios (muchas veces también entre familiares), o entre socios y directores o gerentes de sociedades, origine simultáneamente procedimientos arbitrales, penales y administrativos. Lo mismo sucede en conflictos y contingencias en diversos mercados regulados, en donde muchas veces se involucran una pluralidad de partes, y resultan aplicables diversos estatutos legales. Por esto creemos que una mirada amplia que combine las experiencias y distintas visiones de abogados que han abordado disputas desde estas distintas áreas del derecho, constituye una ventaja significativa a la hora de definir la estrategia que mejor se ajuste a los objetivos de empresas o personas enfrentadas en un conflicto”.
- ¿Cómo ha sido empezar esta firma de abogados, con tus socios y en plena pandemia?
Ha sido un periodo de adaptación a las nuevas modalidades de trabajo, como en todos los rubros. En lo estrictamente jurídico, los Tribunales y la Administración Pública se han ido adaptando a la pandemia y se encuentran aún funcionando en modalidad remota, pero en las últimas semanas se ha comenzado a volver a formas de trabajo más presenciales. En lo interno, ya estamos comenzando a trabajar físicamente en nuestras oficinas, intentando retomar paulatinamente el trabajo presencial, con flexibilidad. - Por lo mismo, durante estos últimos meses ¿qué litigios les ha tocado más abordar?
Vemos que la pandemia ha intensificado los conflictos, tanto en distintos tipos de empresas como en las relaciones de los particulares con el Estado. Nos encontramos, por ejemplo, asesorando a personas involucradas en disputas con sus socios producto de que los negocios han sido más difíciles en los últimos meses, así como también asistiendo a empresas que, con ocasión de decisiones tomadas durante la pandemia, se han visto envueltas en disputas y discrepancias con distintos organismos públicos.
- ¿Cuál diría que los diferencia de otras firmas?
Nuestra firma busca ofrecer a los clientes una mirada multidisciplinaria para mitigar riesgos y resolver conflictos, creemos que esta mirada amplia constituye una ventaja estratégica significativa para una oficina dedicada a la resolución de conflictos. Se aprecia con claridad en las fiscalizaciones y sanciones de órganos reguladores, que muchas veces implican también investigaciones penales o litigios civiles indemnizatorios. Lo mismo ocurre con conflictos corporativos entre socios, o entre socios y directores o gerentes de sociedades, que frecuentemente terminan en procedimientos arbitrales, penales y administrativos, por ejemplo, ante la Comisión para el Mercado Financiero.
Paulina Latrach
